TANGOANDO

‘Sensualidad, elegancia y pasión…

las distintas caras del tango’

EL ESPECTÁCULO

Tres características a destacar: sensualidad, elegancia y pasión. El objetivo es que el tango aparezca al completo en todas sus disciplinas, un tango puro, sin corte, como la ilusión teatral que nunca muere.

A través de sus diferentes propuestas, el espectáculo de tango apasionado y sensual revela las infinitas formas de expresar e interpretar este hermoso y sugerente baile argentino.

Nuestras coreografías se caracterizan por ser notablemente técnicas, únicas y variadas entre sí, en estilo, forma y música, donde la representación teatral de los artistas se convierte en protagonista indiscutible en el escenario.

La coreografía, por tanto, utiliza elementos de los diferentes estilos y modalidades del tango: la postura íntima y las piernas lamidas del “tango clásico” y nostálgico argentino; el juego de pies de baile juguetón y ágil de las sugerentes “milongas”; las piernas tijeras y los pasos rítmicos del desenfrenado “tango-nuevo”; los giros precisos y las extensiones de piernas altas de los “tango-vals ballet”; así como las vertiginosas inmersiones y elevaciones del “electro-tango”.

A todo este entramado artístico le añadimos su efectismo, con diseño de luces y proyecciones de vídeo que ayudan a brindar la atmósfera apropiada de cada número en el que la actuación dramática de los bailarines, cuidadosamente ataviados, lograrán crear una velada distinguida, sugerente y memorable.

EL ESPECTÁCULO

Tres características a destacar: sensualidad, elegancia y pasión. El objetivo es que el tango aparezca al completo en todas sus disciplinas, un tango puro, sin corte, como la ilusión teatral que nunca muere.

A través de sus diferentes propuestas, el espectáculo de tango apasionado y sensual revela las infinitas formas de expresar e interpretar este hermoso y sugerente baile argentino.

Nuestras coreografías se caracterizan por ser notablemente técnicas, únicas y variadas entre sí, en estilo, forma y música, donde la representación teatral de los artistas se convierte en protagonista indiscutible en el escenario.

La coreografía, por tanto, utiliza elementos de los diferentes estilos y modalidades del tango: la postura íntima y las piernas lamidas del “tango clásico” y nostálgico argentino; el juego de pies de baile juguetón y ágil de las sugerentes “milongas”; las piernas tijeras y los pasos rítmicos del desenfrenado “tango-nuevo”; los giros precisos y las extensiones de piernas altas de los “tango-vals ballet”; así como las vertiginosas inmersiones y elevaciones del “electro-tango”.

A todo este entramado artístico le añadimos su efectismo, con diseño de luces y proyecciones de vídeo que ayudan a brindar la atmósfera apropiada de cada número en el que la actuación dramática de los bailarines, cuidadosamente ataviados, lograrán crear una velada distinguida, sugerente y memorable.